LIBERTAD DE PROTESTAR
Si algo no nos parece correcto, tenemos el derecho de protestar, si lo hacemos en forma pacífica y respetuosa, mejor aún. Este es un derecho consagrado en las Democracias y por eso son llamados de PAÍSES LIBRES. Ya en los países en que impera una dictadura, como la comunista, por ejemplo, este derecho no existe, pues la opresión comunista no lo reconoce y, muy por el contrario, lo castiga con la cárcel, por varios años. La propia Constitución cubana reconoce este derecho, pero los comunistas lo ignoran y reprimen toda protesta. El gobierno comunista se prepara para reprimir las manifestaciones pacíficas que ocurrirán en noviembre próximo en toda Cuba. Ellos dicen que nadie tiene el derecho de protestar, porque todo lo que ellos hacen es perfecto y protestar contra lo que es perfecto es un absurdo. A seguir transcribimos un trecho de un artículo escrito por un periodista – abogado que fue preso en Cuba por hacer periodismo independiente.
“Ser contrarrevolucionario no es un delito – por lo menos es así en todo el mundo – es una opción política que hoy es más adelantada y progresista que la defendida por la cúpula del Partido Comunista de Cuba. El PCC defiende el sistema de partido único, la gobernabilidad del país solo por ellos (por eso son los más egoístas del mundo) y el bloqueo a toda libertad ciudadana, lo que la sitúa en un rancio conservadorismo político que ha demostrado con creces su inviabilidad. Hoy los “contrarrevolucionarios” cubanos – ¡paradojas de la historia! – son quienes se han situado en una posición realmente transformadora de los destinos de la patria, porque luchan por un país donde haya espacio para todos, sin hacer separación de personas según su posición política. Son esos “contrarrevolucionarios” los únicos capaces de el programa del Moncada y los acuerdos suscritos en los pactos de México, La Sierra y Caracas, traicionados después por el propio Fidel Castro”.
(Roberto Jesús Quiñones Haces, fue encarcelado por los comunistas durante los años 2019 y 2020 por ejercer el periodismo independiente en Cuba).
Salió en las redes sociales:
“¿Cómo se le explica a un niño que no hay dinero ni para comer, ni para comprarle un dulce? Si no fuera por Venezuela, en Cuba no habría combustible. ¿Cómo explicar que un pollo marinado cueste 350 pesos y una jubilación media mensual sea de 1.500 pesos? La Jamonada (Jamón NADA) valga 54 pesos la libra (110 pesos el kilo). El racionamiento no es nada más que una consecuencia del desacierto, principalmente alimentario, mucho peor que el de Venezuela. Qué decepción y rabia esperar 4 a 5 horas en la cola para comprar carne, pero cuando llega su vez, ACABÓ, no hay más nada”.
Con Allende, lo vimos y lo sufrimos. Com Boric será lo mismo.